Saga La niñera mágica

No tengo muchas oportunidades de hacer críticas de películas de hace tiempo (y especialmente clásicas, cosa que me gustaría), porque esta sección ya tiene un excesivo protagonismo, así que siempre que no hay nada urgente que publicar en ella debo dedicarme a las otras. Pero, hay veces, como esta, en la que puedo escribir sobre películas anteriores a la creación de este blog y eso me encanta.

También he reflexionado, últimamente, sobre lo poco que concedo las más altas valoraciones (tiene lógica, es difícil dar un juicio definitivo con un sólo visionado y sin perspectiva histórica… etc), así que también trataré de cambiar eso en lo más posible (en este caso no me cuesta nada, eso también es verdad).

En fin, comenzamos:

 

 

La niñera mágica

TÍTULO ORIGINAL	Nanny McPhee
AÑO	2006
DURACIÓN	97 min.
PAÍS
DIRECTOR	Kirk Jones
GUIÓN	Emma Thompson (Libros: Christianna Brand)
MÚSICA	Patrick Doyle
FOTOGRAFÍA	Henry Braham
REPARTO	Emma Thompson, Colin Firth, Angela Lansbury, Kelly Macdonald, Thomas Sangster, Celia Imrie, Derek Jacobi, Imelda Staunton
PRODUCTORA	Coproducción GB-USA; Universal Pictures / Working Title
WEB OFICIAL	http://www.nannymcphee.com/
GÉNERO	Comedia. Infantil | Magia. Cine familiar
SINOPSIS	Los siete hermanos Brown, Simon, Tora, Eric, Lily, Christianna, Sebastian y la pequeña Aggy, posiblemente sean los niños más traviesos que jamás hayan existido. Cuidar de su prole y trabajar en la funeraria local es más de lo que puede hacer su pobre y agobiado padre. Su esposa murió hace apenas un año y su tía Adelaide, una mandona insensible que le ayuda a llegar a fin de mes, amenaza con retirarle la pensión si no se casa dentro de 30 días. El Sr. Brown sabe que si no lo hace, irá a la cárcel por no poder pagar las deudas y prefiere no pensar en el destino reservado a los niños. Decide no decir nada a sus hijos, pero éstos se enteran y creen que su padre no les quiere lo suficiente para decirles que van a tener una madrastra. Se comportan todavía peor, si cabe, y consiguen, mediante insoportables travesuras, echar a otra niñera. Simon, el mayor y cabecilla, apunta el tiempo que ha durado cada una de las diecisiete niñeras y las travesuras con las que consiguieron echarlas. Todo el mundo le dice al Sr. Brown que necesita a una niñera muy especial, Nanny McPhee, pero no sabe quién es ni cómo encontrarla. “Nevará en agosto antes de que esto se solucione”, le dice la Sra. Blatherwick, la cansada cocinera, a Evangeline, la criada que adora a los niños a pesar de su comportamiento. La familia Brown necesita un milagro, y llega Nanny McPhee.

 

Cuando la película se estrenó, no tenía grandes expectativas sobre ella; lo cierto es que no conocía la obra literaria en la que se basa ni nada de nada, con lo cual lo único que pensaba es que probablemente se trataría de una vulgar imitación de Mary Poppins que su protagonista habría aceptado porque necesitaba dinero, afortunadamente, nada más lejos de la realidad.

Emma Thompson es sobradamente conocida, no sólo como una bella inglesa que hizo la pareja perfecta (física y mental, cultural y esteticamente hablando) con Kenneth Branagh (conocido por sus adaptaciones Shakesperianas y por conseguir que productos archiculturales se conviertan en perfectamente comerciales; además de que, una de sus películas, ha sido de las pocas que ha conseguido en Universo de A el máximo calificativo: Obra maestra; me estoy refiriendo a La flauta mágica) del que inexplicablemente se separó; sino por ser, no sólo una actriz de demostrado inmenso talento en muchos géneros, pero también una magnífica guionista que ha obtenido una importante cantidad de premios internacionales por sus obras; buena parte de ellas adaptaciones, como es el caso de esta película, por lo cual, juzgar la historia, es juzgar su guión (y más teniendo en cuenta que se basó en varios libros y no sólo uno en concreto), cosa que procederé a hacer: lo cierto es que, como ya digo, no he leído los libros de Christiana Brand, pero conociendo el trabajo de Emma Thompson, estoy seguro de que las adaptaciones han sido respetuosas y siempre en consonancia con la esencia de los libros (si alguien piensa lo contrario, con conocimiento de causa, que lo diga).

En cualquier caso, a nivel cinematográfico el guión es simplemente brillante: no hay una sóla frase que no esté donde debe estar, ni una sóla incorreción, nada que no tenga sentido o sea apropiado… en definitiva: sublime, otra obra de la maestra Thompson (y las comparaciones con la niñera Poppins rápidamente desaparecen según conocemos a Mcfee, que no tiene nada que ver).

Un buen guión es siempre un buen comienzo, y algo muy importante, pero no es lo único; por eso la brillante dirección encamina la historia para conseguir una maravilla cinematográfica que, si bien no está exenta de predicibilidad en algún fragmento… otras tantas obras maestras también lo están, y no por ello dejan de ser magníficas películas. En todo caso, el ritmo es perfecto en todo momento, cada plano y encuadre elegido parece destinado a crear una gran y emocionante película.

La dirección artística y vestuario, quizás debido a su extravagancia, aseguran el ambiente fantástico y de cuento de hadas que tan bien le va a la película y que refuerza su encanto, todo ello resaltado por una bella fotografía.

Y no se debe olvidar la incomparable partitura, con unas melodías que aparecen en la película en el momento justo y del modo más perfecto.

Sólo queda hablar de un reparto lleno de primeras figuras del arte dramático británico: la siempre talentosa Emma Thompson, que borda un papel que no se podría concebir sin ella; una Angela Langsbury grandiosa en su vuelta al cine tras tantos años; Imelda Stauton o un correcto Colin Firth (autentico profesional en papeles de calzonazos); incluso el repelente niño Thomas Sangster tiene cierto encanto (acerca de estos dos últimos actores os recomiendo leer la crítica de La última legión). Pero las caras conocidas no son lo único, una serie de secundarios esplendidamente escogidos completan un reparto ideal, que debe ser la envidia de cualquier director de casting. Así pues, el excelente elenco pone la guinda a una película absolutamente deliciosa.

Y como no, no faltan las escenas memorables: las coletillas de la niñera Mcfee, sus ingeniosos castigos o sus inteligentes soluciones a los problemas al igual que las de los niños, pero, si bien todo lo anterior es fabuloso, no es nada en comparación con el excelentísimo final de la película que garantiza también nuestra felicidad a la conclusión de esta.

 

Valoración final: Obra maestra, esta película merece la inmortalidad que toda obra de arte debe tener, pues contiene todos los elementos para ese fin.

 

 

La niñera mágica y el big bang

TÍTULO ORIGINAL	Nanny McPhee and the Big Bang (Nanny McPhee Returns)
AÑO	2010
DURACIÓN	105 min.
PAÍS
DIRECTOR	Susanna White
GUIÓN	Emma Thompson (Libros: Christianna Brand)
MÚSICA	Varios
FOTOGRAFÍA	Mike Eley
REPARTO	Emma Thompson, Maggie Gyllenhaal, Ralph Fiennes, Rhys Ifans, Maggie Smith, Asa Butterfield, Bill Bailey, Daniel Mays, Nonso Anozie
PRODUCTORA	Coproducción GB-Francia; Studio Canal / Universal Pictures / Working Title Films / Three Strange Angels
WEB OFICIAL	http://www.xn--lanieramagica-lkb.es/
GÉNERO	Fantástico. Comedia | Cine familiar. Secuela. II Guerra Mundial
SINOPSIS	En la Inglaterra en guerra, Nanny McPhee (Emma Thompson) se presenta a la puerta de una joven madre, la Sra. Isabel Green (Maggie Gyllenhaal), que intenta llevar la granja mientras su marido está en el frente. Después de su llegada, Nanny McPhee descubre que los hijos de la Sra. Green libran su propia batalla contra dos primos malcriados recién llegados de la ciudad y que no tienen ninguna intención de irse. Sirviéndose de todo, desde una moto voladora y una estatua viviente, hasta un cerdito trepador de árboles y un bebé elefante que aparece en el lugar más inesperado, la niñera mágica da cinco lecciones a los traviesos e intrépidos niños.

 

Tras cuatro años, lo que menos se podría esperar sería una secuela de aquella maravillosa película, así que cuando lo supe creció mi emoción e impaciencia… pero pronto desaparecieron.

El saber que Emma Thompson habia decidido hacer una versión de su imaginación, totalmente libre y sin tener en cuenta los libros me asustó un poco, lo reconozco, pero pensé «Bueno, después de todo es Emma Thomphson, seguro que sale un buen guión»… pero olvidé que incluso los genios tienen bajones.

La historia que estaba tan brillantemente orquestada en la primera parte, en la segunda no tiene ni la causa ni la consecuencia que tan brillantemente estaban entrelazadas en la original; con lo cual las lecciones morales y los significados se pierden totalmente (y no es que yo sea un moralista, pero si haces algo, hazlo bien), por si fuera poco Thompson parece querer compensar todo esto con secuencias fantásticas y extravagantes que carecen de sentido; y encima, la historia deriva en una serie de cosas sin demasiada lógica. Al final, lo único a resaltar del guión son las autoparodias a la propia niñera Mcfee y las escasas referencias a la anterior película.

El cambio de director consolida el desastre porque, si bien la película está medianamente bien dirigida, las comparaciones con la anterior quitan a esta segunda parte toda posibilidad de resaltar.

Otros aspectos técnicos también están bien, pero dados los malos precedentes, ya apenas te fijas… bueno, hay algo en que lo que sí: el uso y abuso de efectos digitales, que parecen puestos expresamente para impartir una perfecta lección de que a una película, por añadirle más efectos, no la hacemos mejor.

Los actores vuelven a incluir (y esta vez más que nunca) grandes caras del cine británico… pero uno acaba viéndolos desaprovechados en este producto, no hay actuaciones brillantes, y algunas incluso dejan bastante que desear, como Maggie Gyllenhaal… de hecho, lamento decir que, en general, los actores sorprenden para mal.

 

Valoración final: indigna e innecesaria secuela de una gran película; se trata de un trabajo a olvidar en la filmografía de la gran Emma Thompson.

Si bien no se puede decir que sea una mala película, que en ningún caso se pueda recomendar (como producto individual); también es innegable que no es nada brillante, sólo una película del montón.

 

Post scriptum 11-2-2019: Vista la gran cantidad de gente que consulta este artículo con la esperanza de que haya una tercera parte de la saga, debo decir que, a día de hoy, no existe ninguna evidencia de que la vaya a haber (no al menos, en un futuro próximo). Emma Thompson fue la principal promotora del proyecto, y sus múltiples compromisos (es una de las actrices británicas más consolidadas y solicitadas) lo hacen sumamente improbable… pero nunca se sabe.